Todo lo que debes saber sobre las muelas del juicio

Las muelas del juicio suelen comenzar a salir en torno a los 18 años de edad, cuando ya se ha alcanzado una cierta madurez. Como dentistas en Madrid Centro de referencia, somos conscientes del desconocimiento generalizado que existe alrededor de estas muelas y por qué en muchos casos es necesaria su extracción. Por eso, a continuación, resolvemos todas las dudas y compartimos toda la información relevante que debes saber sobre ellas.

¿Tienen suficiente espacio las muelas del juicio para salir?

Esta es una de las preguntas más habituales cuando se trata de los terceros molares. Se trata de las últimas piezas que aparecen en la boca, y es habitual que, cuando llega la hora de que salgan, no tengan espacio suficiente para crecer de forma adecuada. También cabe destacar que por lo general salen cuatro muelas, pero no siempre es así, ya que en algunas ocasiones solo salen dos, o ninguna, por ejemplo.

Cuando tienen falta de espacio, algo que no ocurre en todos los casos, pueden salir de forma parcial, o torcidas, lo que puede llevar a molestias y complicaciones dentales.

¿Es necesario extraer las muelas del juicio?

Mucha gente piensa que las muelas del juicio hay que extraerlas. Sin embargo, esto solo es así si resultan molestas o si no van a poder salir correctamente. En todo caso, es el dentista de confianza el que debe examinarlas y recomendar su extracción si es necesario.

Hay que tener en cuenta, que cuando la muela no puede salir de forma adecuada, puede provocar dolor en el paciente, así como la hinchazón de la encía, riesgo de infecciones o caries, entre otras cosas.

Si la muela en cuestión no presenta ninguna molestia, no es recomendable su extracción, puesto que se trata de un procedimiento invasivo, en el que, en algunas ocasiones, es necesario eliminar parte del hueso, e implica un postoperatorio molesto.

En el Centro Dental Lavapiés, como dentistas en Madrid Centro de referencia, recomendamos siempre acudir a la clínica dental de confianza en caso de notar la más mínima molestia en estas piezas dentales, con el fin de poder prevenir problemas mayores en el futuro.